Las cuatro de la tarde no era una buena hora para ir a comer a un restaurante, pero al avisarle de nuestro retraso, Julio me dijo:
– ¿Donde os van a dar de comer a estas horas?
– En ningún sitio, y menos tan bien como aquí – contesté. Continue reading
– ¿Donde os van a dar de comer a estas horas?
– En ningún sitio, y menos tan bien como aquí – contesté. Continue reading